La construcción naval croata: Desde los gigantes buques de guerra hasta los veleros modernos
La construcción naval croata
Desde los gigantes buques de guerra hasta los veleros modernos
Más de seis mil metros cuadrados de las velas blancas recientemente han sido desplegadas en un velero de 162 metros de longitud y han recorrido el mar de Split para representar lo mejor de la tradición de la construcción naval croata.
Un otro rompehielos de las gradas croatas ha llamado la atención de la gente del mundo entero y se trata de un yate de lujo concebido para las expediciones polares que con su ordenación, la cantidad y calidad de equipos sobrepasa todo lo visto hasta ahora en los buques destinados a los cruceros de varios días. ¿Poquísimas palabras? Entonces imagínese un recorrido por el Ártico a borde de uno de los dos helicópteros disponibles, el buceo en el submarino, el remo aventurero en los kayaks y las embarcaciones de goma y entonces el regreso al borde del buque equipado de las salas de spa y de las piscinas, con la selección de los platos de varias gastronomías del mundo y otras sorpresas y comprenderá mejor como la construcción naval en las gradas de Pula ha alcanzado un nivel completamente nuevo.
La construcción naval croata es una de las más famosas del mundo
Es imposible nombrar todos los logros de la construcción naval croata en este siglo y en el siglo pasado, desde los buques mercantes, de guerra, multiuso y especializados hasta el más grande barco petrolero jamás construido en el Adriático - el barco petrolero Kanchenjunga, de longitud de 335 metros o la reconstrucción de un minador para ser convertido en el buque escuela Galeb (Gaviota).
Un otro icono de la construcción naval nacional atrae a muchos exploradores de todo el mundo, pero solamente a los más audaces, porque se encuentra en la profundad de 66 metros, en el fondo marino. Se trata del acorazado Szent István. Fue construido en el astillero naval de Rijeka en 1914, como el cuarto buque de la clase Tegetthoff, orgullo de la marina austrohúngara y uno de los más grandes acorazados de aquella época.

A la madrugada del día 10 de junio de 1918, fue impactado por dos torpedos italianos, desde cuando yace en el fondo marino cerca del islote Premuda, como una atracción de buceo.
Con estos gigantes «vivos» de la construcción naval, que navegan por los océanos del mundo, no debería extrañar que durante los últimos 50 años, desde cuando se otorga el prestigioso premio internacional del buque del año, los astilleros croatas han sido laureados hasta 27 veces.